El presidente José Raúl Mulino desmintió este jueves los rumores sobre una supuesta presencia militar extranjera en el Canal de Panamá. Aseguró que su gobierno no ha recibido información oficial de Estados Unidos sobre este tema y reafirmó que la administración del Canal está completamente en manos panameñas.
"El Canal es nuestro, no hay discusión", enfatizó Mulino, dejando claro que la soberanía sobre la vía interoceánica no está en negociación. Además, subrayó que la neutralidad del Canal está protegida por tratados internacionales.
El mandatario también aclaró que las concesiones portuarias cercanas al Canal no afectan su operación. En ese sentido, anunció una auditoría para revisar una de estas concesiones, enviando un mensaje directo a quienes, según él, “pensaban que estaban por encima de la ley”.
Respecto a la relación con Estados Unidos, Mulino calificó el vínculo como "fuerte", aunque no exento de dificultades. Recordó que su gobierno firmó un acuerdo sobre migración con Washington que había estado paralizado sin explicación.
“No me interesa ningún tipo de pugna ni confrontación, pero tampoco hay fundamentos para una”, sostuvo, reafirmando la apertura de Panamá a la inversión extranjera, siempre bajo condiciones claras.
En un contexto de tensiones geopolíticas entre Estados Unidos y China, las declaraciones de Mulino buscan enviar un mensaje de equilibrio y firmeza: Panamá mantendrá su independencia y soberanía sin buscar enfrentamientos con las potencias.